Cinecomio busca

EnglishAlemánFrancésEspañolItalianoNetherlandsRusoPortuguésChino SimplificadoJaponés
CoreanoÁrabe
Mostrando entradas con la etiqueta Clint Eastwood. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Clint Eastwood. Mostrar todas las entradas

sábado, 21 de febrero de 2015

American Sniper.


La ´Humanidad` ha elegido mal, de nuevo.

Si mirásemos atrás en el tiempo, veríamos la cantidad de decisiones que han tomado los hombres (gobiernos) con repercusiones fatales para los ciudadanos y la sociedad civil pacífica. Elementos con motivación económica o política, tan dramáticos que son una huella indeleble para todos aquellos que han sufrido la violencia en sus propias carnes o las de sus familias.
American Sniper dirigida por un Clint Eastwood en plena forma, cuenta la historia de algunos de esos personajes de procedencia humilde que tuvieron que enfrentarse a enemigos invisibles, a vida o muerte para defender a su país y sobre todo a sus compañeros. No obviando otras razones institucionalizadas por motivos religiosos o culturales, se trata de una involución que nos retrotrae como convivencia a la Edad Media.
Tenemos el deber de encontrar otras soluciones capaces de detener ataques o acciones suicidas demandadas por otros, con el fin de asesinar a personas humildes y trabajadores, mujeres o niños. Todo ello es consecuencia de las guerras, evoluciones de los poderosos en contra de la libertad del individuo.

La película será polémica desde todos los puntos de vista, pues desarrolla las labores armamentísticas de una u otra actitud, con jóvenes (y no tanto) que se ven abocados al manejo de situaciones de absoluta violencia en instantes de gran presión, como el protagonista interpretado por Bradley Cooper en toda la extensión de su buen hacer. Su personaje tomó decisiones que causaron víctimas y dolor en sus allegados próximos, incluso en sí mismos, pero también funciona como defensa de sus compañeros. En un caldo de cultivo que alimentará las hostilidades y un deseo de venganza sin fin.
El soldado Chris Kyle ejerció realmente como francotirador en los territorios más conflictivos del planeta, además es autor de la autobiografía adaptada por el guionista y actor Jason Hall. De aquí parte el hecho más polémico de esta historia verdadera, y es calificar de trabajo una acción consistente en matar personas. Aunque, recordando que las armas se empuñan por ambos lados.

En ciertos aspectos, recuerda a otras películas cargadas de realismo belicista como En Tierra Hostil de Kathryn Bigelow o en otras latitudes con Black Hawk Derribado de Ridley Scott. Pero, más concretamente en la competencia sangrienta entre las dos conciencias separadas ideológicamente y en sus creencias místicas o producciones cercanas al western, uno contra otro en un duelo sangriento. También los textos ecuménicos que pregonan ambas religiones entre sus fieles, con el ojo por ojo por bandera, que le emparenta directamente con otro filme de crueldad olímpica y aptitudes irreconciliables, en Enemigo a la puertas de Jean-Jacques Annaud.
Ahora, el director del poncho y devorador de espagueti cuenta las vicisitudes y actos sangrientos que vivió El Francotirador como miembro perteneciente a los Navy SEAL norteamericanos, su acción en batalla frente a los grupos armados iraquíes y de otras nacionalidades con ideología yihadista.
Hasta una vuelta a casa sin solución de continuidad, pues el conflicto no ha parado de crecer en todo el tiempo transcurrido hasta hoy mismo, día en que escribo este comentario y existen más muertos caídos entre el polvo y la ruina. Moral y humana en crecimiento continuo.

Clint Eastwood enfoca su cámara en las acciones rodadas con buen pulso y aquellas repercusiones personales o familiares de los soldados, también muestra de manera aséptica a los ciudadanos que sufren la incursión de la guerra en sus barrios, ya que cualquier tipo de conflicto armado produce daños físicos y sicológicos que perdurarán de por vida en las diferentes conciencias, tanto de soldados como de civiles.
La mayoría de espectadores de American Sniper valorarán esta película atendiendo a los factores ideológicos, y se posicionará en uno u otro sentido dependiendo de una visión traumatizada de la historia sangrienta que se está escribiendo diariamente. Porque, la realidad es que el argumento cuenta con dos francotiradores, uno por cada bando y muchas armas escupiendo fuego.

Así que no comprendo bien, cierta polémica al intentar justificar alguna de las partes cuando realmente se debería buscar una solución que termine para siempre toda esta masacre.
Eso incluye, la opinión de ciertos artistas y polemistas como Alan Moore, volcándose en la repercusión más que en lo verdaderamente importante, un uso mecánico de las armas para resolver las diferencias culturales, religiosas o políticas.
Los hechos dramáticos, que se cuentan en El Francotirador, tienen una carácter universalista y ha afectado a la mayoría de sociedades de una manera u otra, por lo que todo el mundo se siente legitimado para elevar la voz de su opinión.
Aquí, en cualquier lugar del mundo, se acusa del polémico y arraigado concepto que no diferencia a nadie, el patriotismo unido al sentimiento religioso por encima de la vida de los inocentes.
Por tanto, que se convierte en una parte sustancial del problema.
Precisamente, ahí radica la dificultad para calificar este filme.

En el terreno técnico, Clint Eastwood se rodea de unos actores novedosos en su carrera, ya que no han participado de anteriores proyectos del genial y maduro director, no olvidemos que pertenece a los USA como el protagonista de la cinta. Y no sólo rueda la historia con precisión histórica, sino que ha viajado con su equipo a localizaciones que van desde California a Marruecos, con todos los problemas que acarrea el traslado de los equipos técnicos, el calor o las miradas furtivas.
Los momentos de acción caótica y respiración controlada, desprenden un marchamo de realidad que intriga, emociona y asusta a partes iguales, con una pareja protagonista deudora del sueño americano y frustrada por la separación y las obligaciones patrióticas de cara a su país y la opinión pública, completada por una atractiva Sienna Miller.

No falta, por supuesto, el sufrimiento de la población musulmana que vive diariamente sometida a regímenes tan autoritarios como violentos. Decadencia o nulidad por el valor de la vida, agravada por sus condiciones económicas y un futuro en manos del petróleo. Por ahora.
Como en todos los conflictos bélicos, desde el comienzo de los enfrentamientos entre humanos, los que pierden son los humildes. Serán los trabajadores y los niños, porque pierden sus casas y vecinos, abandonan sus trabajos y métodos de manutención para embarcarse en legiones sangrientas que empobrecen a su país, aun más si cabe... mientras el cadáver de un niño inocente, forzado a una guerra adulta se ve ensangrentado sobre el suelo de la incomprensión. Fin de la educación.
Quedan las viudas y los huérfanos, mientras los señores de la guerra se siguen frotando las manos con su negocio de las armas y la muerte. No hemos avanzado tanto, porque cuando no hay soluciones, todos somos víctimas.

Creo que Mr. Eastwood, no es culpable de la controversia ni de las manifestaciones en contra de la labor de un soldado, simplemente ha mostrado las circunstancias vividas por esa persona y descritas en una biografía (evidentemente con una única visión del conflicto) en un caso que, desgraciadamente, estamos todos viviendo y padeciendo. Y parece que no tiene visos de terminar.
Como anécdota, si que el director tiene la culpa de la elección de un robot-maniquí bebé. Cosas de la tecnología.

Chirs Kyle fue otro de aquellos niños que crecieron en una sociedad que admite el uso de las armas en su vida cotidiana, y una víctima más de el concepto equivocado que se baraja en el mundo... la guerra como forma de vida.
Cuando en realidad, es todo lo contrario.

- Sin Calificar -

Ennio Morricone - The Funeral


American Sniper Movie Official "Van Morrison- Someone Like You" Soundtrack / Song


Marvin Allen - A Hero's Sorrow [American Sniper Soundtrack]



martes, 23 de abril de 2013

El Jinete Pálido.



















Clint Eastwood: despertó el western de entre los muertos...

Aromas del viejo y epopéyico western.

Corría el año del señor 1985, cuando un viejo vaquero curtido en numerosas y cruentas escaramuzas, Colt en mano, se decidió a impulsar el género de sus pioneros cinematográficos. Coincidió con otro personaje llamado Lawrence Kasdan que con el film del mismo año titulado Silverado, dieron una renovación de la visión antigua del Western.
Su nombre, no el del predicador sino el cineasta, era Clint Eastwood y sus medios la productora creada en 1967 a su imagen, The Malpaso Company actualmente rebautizada como Malpaso Productions. Nombre tomado de su rancho habitual en Malpaso Creek, ubicado al sur de la pequeña ciudad de Carmel, en California, donde Mr. Eastwood ha pasado gran parte de su vida.

Echando un vistazo atrás, el director Sergio Leone hacía ya casi 15 años que no rodaba un filme del llamado spaghetti western, ya que un año antes en 1984 dedicó sus últimos esfuerzos para crear una obra de una magnificencia colosal con el título de Once Upon a Time in America. Sin duda, un esfuerzo que reclamaría un coste físico, pues cinco años después fallecería dejando huérfano al género que hizo participe a Eastwood de una nueva estética cinematográfica.
Clint aportaría sus pequeñas gotas de esencia al famoso vaquero, dotándole de una estética referente en la historia del cine. Y rescataría para la banda sonora a otro mítico de nombre Ennio Morricone, junto a un compositor de la total confianza como el saxofonista y arreglista Lennie Nihaus presente en muchas de sus películas (como Unforgiven o The Bridges of Madison County).

Pale Rader se iba a convertir en cierta manera en un homenaje al director romano, y algunas de las famosas películas del western clásico como Raíces Profundas de George Stevens, Sólo ante el peligro de Fred Zinnemann o El Hombre que mató a Liberty Balance del maestro John Ford.
El género puesto en los montañosos paisaje del condado de Columbia en el Historic Park, cercanías dónde se rodó también High Noon con un Gary Cooper enfrentándose en solitario a un grupo de peligrosos pistoleros. Y por supuesto, en un parecido personaje al que luego daría otra vuelta de tuerca prodigiosa en Sin Perdón en 1992, en la piel de un endiablado Will Munny.
Este nuevo renacer vendría acompañado de un cierto éxito en la distribución por parte de Warner, ya que el presupuesto inicial de 7 millones de dólares, se convertiría en una recaudación multiplicada casi por 7.

La mítica del 7.



The Preacher es un hombre de mediana edad, ya va peinando canas tras numerosos avatares del pasado por territorios salvajes, dónde la vida no valía ni un puñado de dólares. Distraída barba, sombrero calado con cinta de piel que oculta unos ojos desgastados por las visiones de antaño, y un pañuelo al cuello con recio abrigo para cubrir las adversidades del tiempo y la llamativa vestimenta.
Unos ojos que ocultan un fulgor contra la sociedad enferma, su pasado posiblemente criminal y la envoltura endiablada de su conciencia.

A lomos de su caballo cano llega su fantasmal figura, estilizada como una montaña, portando su uniforme de recolector de almas, que él mismo en el pasado mandaba al mismísimo infierno. Un alzacuellos disimula o disfraza antiguos golpes de espuela a la grupa con galope escapando de la muerte. El golpe de percutor incluido.
La búsqueda azarosa de una ciudad indefinida, le lleva a los pies de montañas enfebrecidas por la necesidad o la codicia. Otra ciudad sin nombre, como él mismo. Muy bien ambos pudieran llamarse Diablo o algo por el estilo.



Sus moradores son mineros en busca del poder del dinero, para salir de su empobrecida vida. A los ojos del predicador son un grupo de ovejas perdidas a las que poder inculcar su visión mística del asunto.
Pero, también son la resistencia al poder establecido por los cañones de agua a presión y las cargas dinamiteras. Aunque su poder sea más de palabra que de hecho.
Ellos configuran la artesanía en la explotación minera y de los recursos naturales, mediante pico y golpe de suerte. Sin embargo, el terrateniente de turno está dispuesto a hacerles bajar de la burra de carga, a través de las malas artes y la contratación de pistoleros si fuera menester. Su nombre LaHood interpretado por Richard Dysart, y su hijo en el añorado rostro de Chris Penn.

Los futuribles fieles se encuentran furtivamente con el Predicador y su altanera dialéctica, sobre la defensa de sus bienes y sus familias. El cabeza de familia interpretado por Michael Moriarty tiene el convencimiento pero no la técnica; eso sólo se aprende con la experiencia del día a día en antros de mala muerte y duelos al sol.
Así, el vaquero de la sotana invisible y botas de montar, se encariña de la familia (inclusive enamora a la joven hija con semejanzas a una virgen inmaculada) y decide echarles unas balas de ayuda. Su odio ante la injusticia del poderoso explotador, le hace revolver sus tripas y proclama su ferocidad ante los hombres indolentes, incapaces de defender la tierra que pisan.

El hombre de paz sin crucifijo en ristre, oculta en su interior un ser endiablado de ojos inyectados en sangre y bilis. Luchando por no salir a la superficie, no tiene más remedio que hacer presencia con la llegada de las siete "plagas de Egipto", y sus métodos de asesinato a sangre fría. La maldad y la codicia aparecen como un pasaje de la Biblia, una maldición para el pueblo sacrificado. Con la cara de la abominación interpretada por un majestuoso abigotado y frío jefe de encurtidos pistoleros de nombre Stockburn (curiosa mezcla de signifidos stock "capital" y burn "quemadura"), recreado por el genial John Russell.

Así, Clint Eastwood se reencarna en el pistolero vengador del spaguetti "leoneiano", él mismo que resucitará en el posterior western Unforgiven, un rostro pálido que enrojece con la cólera de la opresión. Y se quita el disfraz para enseñar su oscuro pasado baleado en la espalda con 6 o 7 marcas de cañonazos a discreción. El ángel exterminador se alza de nuevo.
Las referencias sagradas emergen en el filme dirigido con pulso y talento por el director californiano nacido en San Francisco, y con el guión de una excelencia en estas labores como David Webb Peoples (firma de otros como Blade Runner, Lady Halcón, Doce Monos y el también el mismo de Sin Perdón).

El final del filme tiene secuencias míticas de un duelo contra los siete pecados capitales representados por pistoleros y gabardinas ocres a juego con elegantes sobreros. Botas de cuero sobre los pantalones y las espuelas sonando en las tablas de los porches y rincones de la pequeña población minera.
Su rodaje es propio de figuras reconocidas que han mamado el western desde su juventud, moviéndose como un verdadero fantasma o demonio por las frías laderas de las Rocosas. De nuevo un Clint Eastwood fantasmagórico repartiendo plomo entre los monstruos abrigados hasta los pies. Sus gabardinas son las que sonábamos en juegos de niños con nuestras pistolas de plástico y pistones de indoloro fósforo.

El Jinete Pálido tiene todos los ingredientes para convertirse en una película pequeña de culto y de personajes épicos.
El Predicador lleva en su Carne, la marca de 7 heridas que devolvieron al diablo a su refugio interior, tan profundas que duelen en el alma de la fe.
Son 7 los demonios como plagas o pecados capitales, vestidos con la frialdad de la opulencia y el poder inmaculado.
El demonio es un fantasma que en esta ocasión no necesita de alcohol para su aparición, y mata con 6 tiros a quemarropa más uno, cerebral y calculado para que la bestia no despierte nunca más.

Un golpe último de espuela y el vaquero desaparecerá de nuevo como llegó, como un fantasma entre los campos nevados.

**** Muy Buena *****

Pale Rider 1985, composición de Lennie Nihaus y Ennio Morricone.


A falta de Western en cartelera, y como Clint Eastwood se encuentra en pre-producción de su nuevo filme, la versión de la famosa Ha Nacido una Estrella, vamos con algún estreno más volador.
Iron Man 3, de Shane Black. Reparto: Robert Downey Jr., Ben Kingsley, Gwyneth Paltrow, Don Cheadle, Guy Pearce, Rebecca Hall, James Badge Dale, Stephanie Szostak y Wang Xueqi. 

Trailer Rebelle, de Kim Nguyen. Reparto: Rachel Mwanza, Alain Lino Mic Eli Bastien, Serge Kanyinda, Mizinga Mwinga, Ralph Prosper, Jean Kabuya.

ARTUR NUNES - Tia (Rebelle Soundtrack)


viernes, 30 de noviembre de 2012

Unforgiven: El Sol del Crepúsculo.



Con Eastwood renace el Western.

Hace ya tiempo, algunos años olvidado en la memoria, el Oeste parecía decrépito y desgastado. Mas, sólo algunos maestros, podían quitar tanto polvo acumulado en el cuero de sus botas.
Desde aquella trilogía de Leone, habían pasado 26 años (para nosotros ya sumarle 20 tantos más, por favor) y crea un universo con aroma a áquellos films de sus inicios como actor. Pero, también a los más consagrados dioses del Western, como John Ford o Howard Hawks.
Comenzaré un relato, a modo de homenaje. Para Unforgiven y Mr. Clint Eastwood.

La figura del viejo pistolero enmarcada en una rojiza y perenne puesta de Sol, podría ser el comienzo o el final de una historia de antiguos héroes y villanos en el salvaje oeste.
El cawboy va desapareciendo recortado en la lontananza a lomos de un caballo enardecido por sus brillantes espuelas. Pasará del amanecer sin destino al crepúsculo de un film inmortal.
Clint Eastwood vuelve a ser ese vaquero que desaparece en el ocaso en un western crepuscular como pocos, en busca de un nuevo amanecer en su vida.
En el caso de Sin Perdón, intentará retomar las riendas desbocadas de su familia.
El rojo Sol será la señal de un nuevo día y futuro mejores.

Además, todo ello toma una envergadura de misticismo cinéfilo.
Un rostro curtido y cortado por mil batallas frente al desierto y la cámara, la figura resaltada de una elevación física y facial sin oposición, y de una interpretación al alcance, únicamente, de los más grandes en el género.
Clint Eastwood, volvió para quedarse con el público e idolatrarle como actor-director en estado de gracia absoluto.

En fin, un pistolero surgido de charcos de sangre en el pasado que ha terminado con sus huesos fatigados en charcos de fangos en la granja de sus sueños.
Un asesino de mujeres y niños que mutó a dominador de puercos manchados de inmundicia, siempre ocultando los primeros caídos en el antifaz del alcohol manipulador.
Sin embargo, la edad no perdona y las caídas de estas monturas encabritadas, pueden devolverle como anciano imperdonablemente justiciero.

Mientras el pequeño ganadero William Munny, en las polvorientas llanuras de Wyoming, dedica su esfuerzo a sacar adelante su parcela y alimentar las bocas de sus vástagos huérfanos de madre, en la ciudad de Big Whiskey (antes lejana por la inminente llegada del reluciente ferrocarril), un cuchillo cobarde corta la carne de la lujuria.
La lucha del irracional machismo por la posesión de la mujer, a cualquier precio, esta véz no quedará sin perdón.

Un grupo de prostitución, mujeres como casi siempre, no permitirán que la vulgaridad y el salvajismo campe a sus anchas por la ciudad.
Como posesión, ellas tendrán algo que dilucidar de su futuro.
Y esto es, la venganza.
La ilusión de un dinero que podría suponer un nuevo comienzo, llegará a los oídos de viejos vengadores empolvados en el camino del Oeste. De aquí y allá, se deslizarán los revólveres, a caballo animal o de vapor.
Y nuevos trovadores, paparazzis de la época, se encargarán de contar las últimas hazañas o actos violentos (sin más), plumas y balas brillando en las páginas de periódicos y libros, que empiezar a llegar a la gran civilización urbanizada.

Las pistolas pendencieras de antaño, se convertirán en rivales por la dignidad y la ética de los viejos blues en tiroteos y ajustes de cuenta.
El ganador será el mejor postor. De viejos como Gene Hackman, Morgan Freeman y Richard Harris, a los nuevos rostros aniñados y envalentonados, como The Schofield Kid (interpretado por Jaimz Woolvett). Todos embelesados en el vil metal.
Ni los pocos años ni el alcohol añejo, podrán reponer el valor perdido.

Todos los encuentros, se centrarán en el mal. Un mal reluciente de puntas plateadas. Un brazo peligroso por armado, de la ley, de la mala ley.
La ostentosa ley del más fuerte. La estrella plateada de la muerte.
Otro grande, él, Gene Hackman como Little Bill Daggett. De pequeño no tiene nada, este gran "cabronazo" de la escena.
Un quinteto enfrentado por unos cuantos dólares, por cabezas sin inteligencia, vaqueros de pantalones bajados, esperando la muerte en cualquier putrefacto sumidero. A manos de uno cualquiera, llegado con ínfulas de grandeza y espantado con arcadas y sollozos apagados por el whisky.

Y las prostitutas verán en los refulgentes revólveres, las muescas de la justicia por su mano.
En un mundo sin ley, la pólvora amartillada en salas sin demandas que resolver.
Marcas por almas sin piedad.
Letras escritas a sangre en los ancianos libros de historias de forajidos y forjadores de los territorios salvajes conquistados.
Unforgiven de Clint Eastwood ha entrado por la puerta grande, de los western clásicos del cine.

El Sr. Eastwood se viste como director, sus rancias botas con espuelas, para entrar en una escena oscura. Salida de las mismas entrañas del infierno, como aquél otro jinete pálido sagrado, el final del film se disfraza en película de terror.
Un fantasma infernal herido en su amor propio, repiqueteará por última vez (haciendo homenaje a sus maestros Sergio Leone y Don Siegel), esas espuelas míticas, y cuasi místicas.

Y cuando el viejo demonio, encontrado a base de lingotazos, alarga sus terribles garras de venganza... Nadie quedará a salvo. Nada, vivo.
Excepto las letras. Si se dan prisa por huir del salón.
Las únicas salvadas del hombre sin perdón.

Al término, de las justas arcaicas del western, el viejo director de cine se alzará en triunfador arrinconado por premios y oro. Pero, con el aprendido oficio forjado a golpes de experiencias y enseñanzas pasadas otrora.
Capacidades intactas que sigue demostrando en la actualidad, y que adornarán las vitrinas cinéfilas de cualquier aficionado al arte de los 24 fotogramas.
Fieles por siempre a Clint Eastwood. Sin Perdón. Gracias.

***** Excelente *****

Tema de Claudia, b.s.o. Unforgiven.


Clint Eastwood y su otra pasión la música... Está en pleno desarrollo de la adaptación del musical dirigido por William A. Wellman en 1937, Ha Nacido una estrella. Clint Eastwood dirigiendo un musical pleno.
Estracto de Ha nacido una estrella, versión de George Cukor 1954, con Judy Garland:

jueves, 22 de noviembre de 2012

Trouble with the curve: A la vejez... pelotas de béisbol.



¿Sólo es un juego o la vida?

Cuando me llegó el pase para el film Trouble with the Curve distribuida por Warner, y conocer que se trataba de una historia desarrollada en su mayoría en el deporte del béisbol, me pregunté cuándo me pude interesar mínimamente por este juego.

Recordando... me acerqué a esos tiempos de niñez en mi barrió. Un barrio de un pueblo cercano a Madrid, dónde los chavales nos reuníamos en la calle a jugar y establecer lazos de amistad. Una de las actividades que tuvo su momento estelar, fue el béisbol. Ocurría que nos juntábamos entre 20 a 40 niños y niñas, juagando a golpear una pelota de tenis con bates de madera. Muchas veces tallados de ramas caídas de árboles de los parques cercanos.

Cómo pudo ocurrir esto, si en España no hemos dado un sólo golpe de efecto.
Lanzábamos la bola hacia los edificios de entrente, era una calle sin salida superior, por lo que pasaban coches sólo buscando aparcamiento. En ese momento, todo se paraba y nos retirábamos para que el automóvil en cuestión atravesará la mitad de la calle y el terreno de juego. A veces, la pelota bateada paraba en la ventana abierta de algún balcón, e incluso, en el mismo techo del edificio, pues a menudo se cambiaba la madera por el cordaje de una raqueta.

Sí es cierto, esta actividades proporcionaban un nivel de camaradería, competencia sana (en ocasiones enfrentamientos sin llegar la sangre al río) y diversión ante todo.

Así, recuerdo mis primeras incursiones en el béisbol.
No sé quién tuvo la brillante idea de practicar este juego, además de los más habituales claro está.
Lo que si recuerdo es haber visionado una película que me marcaría en edades tan juveniles. Ver entonces a Gary Cooper, tomando los mandos del equipo de sus sueños, entrando al Yankee Stadium y convertirse en un héroe de la sociedad americana encarnando al jugador Lou Gehrig, y enamorado de su sufrida esposa interpretada la guapa Teresa Wright y flanqueado por el omnipresente Walter Brennan. Cómo olvidar aquel discurso ante ojos atónitos y humedecidos por la trágica despedida. Mítico.

En Golpe de Efecto, mucho mejor llamada originalmente Trouble with de Curve, el director Robert Lorenz, su ayudante en dirección en películas como Los puentes de Madison, Mystic River y Million Dollar Baby (aquí en su primeriza e interesante puesta en escena en el rodaje), Clint Eastwood no encarna precisamente al héroe típico americano. Más bien, es el héroe silencioso, observador y oteante, de ruidos y silencios.
Porque en el deporte existe este tipo de personaje. Un ojeador que pasea sus ojos cansados por el tiempo y la experiencia, por campos de juego para futuribles. Pequeñas estrellas por descubrir de manos de estos avezados profesionales, pocas veces reconocidos.
Sin embargo, Clint Eastwood nos vuelve a tocar la fibra sensible. Una mirada o una frase jocosa suya, bastarán para hacernos inclinar ante su personalidad y naturalidad. Una micción de sinceridad, ante la cámara y el público. Admirable.

Trouble with the Curve, es una película sobre perdedores y vencidos. Pero, también de triunfadores en la vida. Por que el talento tiene que ser reconocido al final.
Además, posee un reparto muy acertado y correcto. Destacando a Amy Adams, como la hija del mismo Clint, una actriz que enamora a la cámara y al espectador en cuánto hace acto de presencia.
El béisbol es un nexo, un hilo conductor, para contarnos otras materias más relacionadas con el amor padre-hija, el amor más carnal y la amistad. Un vehículo para establecer un nido de relaciones y sacrificios personales. Para poder vencer hay que arriesgar siempre algo.
El resto del reparto, es perfecto, aunque con nombres como Justin Timberlake, John Goodman, Matthew Lillard, Robert Patrick, Bob Gunton, Ed Lauter, y el propio hijo del jefe, Scott Eastwood (perimiso concedido jiji); es evidente tenía que salir bien forzosamente.

Clint clava otro personaje en plena edad rabiosa de resistencia a la juventud. En este drama mezclado con la comedia romántica y ácida. Sonrisas y lágrimas a dósis justas. Todos buscan encontrar algo importante, Clint a su hija, la hija el reconocimiento y el cariño, el yerno futurible y su búsqueda por el amor de su vida, la gratitud de los viejos amigos de siempre, el castigo de los abusones y trepas, etc.
Pero, al final. Todo es un juego. La vida es un juego.

Un juego en el que se gana o se pierde. El viejo vaquero triunfador en mil duelos fronterizos, se va a encontrar otra vez sólo.
Apoyándose en su profesión y su pasión. Observando bolas con efecto, a la izquierda o a la derecha, altas o bajas, pero siempre intentando encontrar el camino recto de las cosas bien hechas. Capacidades innatas de un ojeador y fenomenal actor.

Debemos disfrutar de este mito viviente, llamado Clint Eastwood. Disfrutar de toda su experiencia y savoir faire, ante y detrás de las cámaras. Hasta en las pequeñas historias que se convierten en regalos cinéfilos que nos proporciona.

Por lo tanto, recomendable disfrutar de esta pequeña bola curvada, por momentos algo envenedada. Con una pequeña sonrisa dibujada en su cara blanquecina y amante de un guante de recepción. Si vale no es nada del otro mundo, pero...

Otro sencillo strike para Robert Lorenz, y su maestro, Clint Eastwood.

*** Buena ***

Trailer End of Watch (Sin Tregua), de David Ayer. Reparto: Jake Gyllenhaal, Michael Peña, Anna Kendrick, Frank Grillo, America Ferrera.


Trailer de la película Invasor, de Daniel Calparsoro. Reparto: Alberto Ammann, Antonio de la Torre, Karra Elejalde, Inma Cuesta.

sábado, 17 de noviembre de 2012

The Bridges of Madison County: Clásico instantáneo.



“Hombre, acuérdate que polvo eres y que al polvo volverás”.
Génesis, III, 19.


Así parafraseando libros divínamente arcaicos, sin eufemismos, el hombre está conformado de materia orgánica y en ella derivará en sus instantes últimos. En el polvo comienza (y termina) una de la mayores historias de amor reproducidas en el cine. Vemos y casi creemos.
Por que las historias vitales, inclusive las más románticas, acaban con seres humanos de ambos sexos, flotando ingrávidos como partículas de polvo grisáceas. El tiempo.

Meryl Streep y Clint Eastwood, tanto monta monta tanto. Han recreado unos personajes que forman ya parte de la cultura cinematográfica, y tan sólo en 18 años. Los Puentes de Madison, han cumplido ya su mayoría de edad y se conserva cada día mejor.
Ambos actores en estado de gracia (y yo creo que algo más) recrean vívidamente esos momentos de enamoramiento que son conocidos universalmente, miedos, dudas, deseo. Una fase de calentamiento-enfriamiento que ni los años venideros podrán hacer olvidar. Tan sólo la muerte.

Amor, ¿hasta qué punto?.
Por supuesto, hasta el punto y final.
¿Realidad o ficción?.
Eso, sólo lo pueden saber los verdaderos protagonistas. Los Puentes de Madison han retratado un universo íntimo sin parangón, y lo dirige el mismo Clint Eastwood. ¡Increíble!.
Y me parece muy bien que quede oculto y misterioso. Que más nos da, cuando el viejo cawboy del poncho raído, se pone detrás y delante de la cámara, y con su ojo en el visor enmarca hermosas estampas de tal calado. Su enorme figura como actor y director queda patente en un estado de gracia absoluto. Al golpe sonoro de la claqueta, Clint y Meryl se rindieron a la cámara sin tapujos y crearon una auténtica Obra Maestra del cine romántico.

Como un viento sedante de verano, vamos observando el proceso, sin velos. El condado de Madison en Iowa, está flanqueado por dos grandes ríos Missouri y Mississippi, y los puentes son pequeños espacios para cruzar vidas.
Un aire templado que igual puede rozar sensualemente un vestido vaporoso medio abierto, (de los momentos más inteligentemente íntimos rodados por el larguilucho vaquero), o igualmente, esparcir las esperanzas infranqueables y los recuerdos cálidos en cenizas al aire.

Así, las partículas de ceniza se transforman en letras, y éstas en palabras, apuntadas y enfebrecidas por la pasión. En las cartas quedará marcada, disimulando besos a hurtadillas como máxima expresión de la libertad individual. Pero, la elección es un mal creado por los seres humanos. Las dudas y el engaño, los miedos y la madurez racional, también lo son.

Robert y Francesca, Clint y Meryl, comparten todos secretos pululantes en el viento con sus familias. Las cartas de amor se convierten declaraciones de ley y sorpresas de maternales demostraciones. La ley del amor. Y como aquellas cenizas arremolinándose en jirones y volutas mortecinas, la declaración quedará olvidada por el tiempo y la vida de todos.
La magia del cine y la maestría de Eastwood mezcla con dósis perfectas, estos dos tiempos familiares en el mismo plano argumental. Funde las risas y los llantos equilibradamente. Y nos recrea con una composición de sentimientos universales unidos a instantes precisa y preciosamente corrientes. Mágicos.
Esos pequeños momentos dentro de la vida de cada uno. Habituales e íntimos que te sumergen en Los Puentes de Madison, creyéndote partícipe de ritual amoroso.
Siempre acompañando las bellas instántaneas con una música deliciosamente jazzística y soul.

Clint Eastwood, duro rostro, cerebro brillante. Se ha transformado. De aquellos héroes errantes por polvorientos caminos y avenidas cargadas de violencia, nos acerca una cara más dulcificada que nunca. Qué gran actor y director.
De sus inicios, guardados en antiguos arcones quedan las botas con espuelas de finas puntas, el poncho raído por mil y una polillas, y su cigarro apagado encima de las cenizas del tiempo. Del gris al dorado inolvidable.
Su carrera a esta alturas se ha desenrollado en alfombras rojas, con todo merecimiento (aunque recordemos que Los Puentes de Madison no tuvo la fortuna, ¿cómo?, he dicho la consideración de acaparar premios importantes. Sip). Visto y comparado con western crepuscular, me parece totalmente injusto para tal joya del romanticismo.

Como has podido Clint, pasar de los colts a una pequeña e íntima historia sobre el amor y la traición. Magnífico. Esperamos que aguantemos por muchos años más y puedas seguir ofreciéndonos estos peliculones. Qué tus cenizas estarán a salvo ya, para siempre, en pequeños receptáculos metálicos de celuloide.
Ahora, ya de múltiples series de bits. Jajaja. Gracias y god save to Clint.


Meryl Streep, no dudo en un solo segundo, adentrarse en esa casa y a esta aventura contigo. El papel le brillaba en los ojos como un amor primerizo.
Dibujó contigo el mejor personaje de su carrera, una mezcla de americanismo a la italiana, muy sensual.
Sin embargo, con matices. Por que una sufrida y casada mujer de la Iowa campestre, cuasi sureña, luchará por la estabilidad y sus cadenas versus la aventura y el romanticismo adulador. Pero, ¿qué hubiera ocurrido con el transcurrir de los años?.
Yo creo que, como la mayoría de las parejas, habrían terminado algo aburridas. Los años pesan en el cuerpo y en la mente. Y su amor escrito, se hubiera difuminado en sus vidas, transformándose en una simple anécdota. Es el desgaste de la convivencia.

Meryl y su transcendente y genial interpretación, no puede empezar esa nueva vida. Escapar para qué y adónde. Por el contrario, Clint se encargará de encender aquellos rescoldos humeantes. Una carta, pulsera y collar... un poema.
Todo ello desencadenarán las amargas lágrimas del pasado. Palabras de amor húmedas. Las mismas lágrimas disimuladas ante el diluvio reflejado en su deseperado rostro. Una llorando. El otro, quízás también, por una manecilla inmóvil y maldita.

Un único adiós.
Una mirada y unas sílabas entrecortadas por la emoción. Tráqueas de espectadores, jóvenes y mayores, tragando galones de saliva.
Seres vivos que buscan en vano el amor, o incluso, han tenido que hacer volar al viento cálido, las cenizas de otros seres queridos.

Clint y Meryl desnudaron sus cuerpos y sus almas en 1995. Y el público con ellos.
Todos sabemos que el futuro, es como el de ellos, convertirnos algun día lejano en polvo.
El rostro de Clint, piensa palabras. Todos estos momentos, se perderán como cenizas en la lluvia.

***** Obra Maestra *****

B.s.o. The Bridges of Madison County.


Trouble With The Curve, dirigida por Robert Lorenz.

Parece que Meryl Streep, tiene un nuevo trabajo dirigido por Tommy Lee Jones, The Homesman. Y otro posterior, junto a Julia Roberts, Ewan McGregor, Benedict Cumberbatch, Abigail Breslin, Chris Cooper, Juliette Lewis. Se titularía, August: Osage County. Quedamos a la espera.

jueves, 23 de febrero de 2012

J. Edgar: Clint Eastwood urgando en restos de archivos del FBI.


El poder del FBI y la polémica.

Esta entrada (a la que me ha costado dar forma) está dedicada a partes de la vida de J. Edgar Hoover que no están tratadas en la obra fílmica, de uno de los mejores directores de la historia del cine.

Clint Eastwood está a punto de cumplir 82 años. Cosa que celebramos todos los aficionados al Séptimo Arte, pues, sigue con todas sus facultades mentales intactas. Y vaya visión para contar películas que tiene este hombre... qué es como de casa.
Al bueno de Clint, le gusta derribar tótems de la sociedad, y para ello se informa e investiga las distintas contingencias que rodean a sus personajes. Por tanto, puedo decir que J. Edgar me parece una película notable, un concienzudo retrato de un personaje histórico obscuro y de personalidad controvertida.

(Primer vídeo Rock del post)... The Shadows, con Hank Marvin - FBI:


Cuando Clint ya había seleccionado para el papel, al gran Leonardo DiCaprio sabía que en sus manos el dibujo sería convincente (a pesar del maquillaje a lo Spitting Image, aunque realmente el de su mano derecha Tolson, es como cartón-piedra).
Pues bien, el director nacido en San Francisco se puso a buscar a la secretaria de J. Edgar. Charlize Theron preferiría otros proyectos y abandonó el proyecto, y Amy Adams fue descartada, quedándose con el papel una magnífica Naomi Watts. Discreta y sopesada actuación la suya, adecuada a los ambientes silenciados de las oficinas centrales del FBI. (No diré nada sobre las maniobras actuales del FBI respecto a la persecución del pirateo en Internet, por si acaso...).
John Edgar Hoover: Fue el primer Director General de la Oficina Federal de Investigación. Y convivió con el temor de 8 presidentes americanos, al poder que había acumulado durante su mandato.
Su vida personal es prácticamente desconocida. Sólo se pueden aseverar algunos datos. Nació en Washington y perteneció a la orden social Alpha Nu. Su ideología se denota en ponerse al frente de la campaña anti vicio contra la pornografía y el control de la natalidad.
La cinematográfica etapa denominada Ley Seca, se convertiría en una apasionante lucha de las entidades policiales contra los jefes mafiosos que controlaban la venta de alcohol y drogas, la prostitución y las apuestas. Dinero negro que salpicaría a diferentes estancias y negocios de los años 20 y 30 en las ciudades de Estados Unidos de América.


Encabezó el Departamento de la División de Inteligencia (Bureau of Investigation) intentando lavarle la cara. Ya que la sociedad de la época le desacreditaba, tildándole de corrupto. Funcionó mediática y socialmente, con medidas novedosas y aciertos en la lucha contra el crimen. Se rodeó de fieles agentes a su servicio, y no le tembló la mano al deshacerse de elementos competidores con su puesto. Contables de calidad, duros abogados y científicos creando nuevas ramas de investigación. Dio un impulso al estudio forense y el control de la escena del crimen.

Más adelante, se convertiría en un feroz anticomunista y acusado de antisemitismo por gentes que convivieron con Hoover. O bien no le interesaba tocar este palo o bien no creyó que fuera lo suficientemente importante, el caso es que Clint Eastwood pasa por alto toda esta etapa.
El Macartismo (1950-56) fue un criminal proceso que juzgaría a diversas personalidades de la sociedad, entre ellas, algunas del mundo del cine. Basándose en acusaciones infundadas, investigando las actividades sexuales de senadores y congresistas e interrogatorios y procesos bastante irregulares.
Esta época oscurantista se denominaría La Caza de Brujas (el escritor Henry Miller dedicaría a ella su obra Las Brujas de Salem).

El proceso que derivó a esta situación, se vio en un contexto donde la URSS experimentaba con la bomba atómica y estallaría la guerra de Corea. Comienzo de la guerra fría y los programas de televisión emitiendo para toda la nación.
Edward R. Munrow se enfrenta a este convulso mundo desde su micrófono. Y el caso del matrimonio Rosemberg hará el resto.
El comité de Actividades Antiamericanas desestimaría el principio de presunción de inocencia y serían acusados de espionaje y entrega de informes top-secret a la KGB. Estaba en juego el dominio de la energía atómica. J. Edgar Hoover rehusaría escuchar sus ruegos de basarse en infundios y serían ejecutados en la silla eléctrica.
Años después, un hermano de la mujer ejecutada se demostraría culpable de los cargos de espionaje.

Durante La Caza de Brujas, el comité de Actividades Antiamericanas se enfrentaría al comité defensor de la Primera Enmienda encabezado por estrellas de Hollywood, como Humpfrey Bogart y Edwuar Dmytryck (posteriormente cantaría y se sometería a una acusación por delación).
Otros acusados en las vistas serían, el escritor Bertolt Brecht (que huiría a Europa), Daltom Trumbo, Alvah Bessie y otras personalidades... Otros implicados en las investigaciones como Charlie Chaplin, Jules Dassin, Cromwell, Frank Capra, Cy Endfield, Starling Hayden o Hammett.

Corrían las listas negras por Hollywood. Y los de la Primera Enmienda (firmado por 500 profesionales del cine) se basarían en hechos a favor de la libertad ideológica. En este bando estarías los buenos, Bogart y Bacall, Gregory Peck, Katherine Hepburn, Kirk Douglas, Burt Lancaster, Gene Kelly, John Huston, Orson Welles, Thomas Mann o Frank Sinatra. Se produciría una lucha de éstos, por seguir al director John Ford (director idealista y valedor de la libertad) contra el más conservador Cecil B. DeMille (y los colaboradores del comité de Actividades Antiamericanas, Gary Cooper, Ronald Reagan o Robert Taylor).

(Vídeo Especial The Shadows... Hablando de John Ford. Apache:


Todo acabaría con McCarthy intentando intervenir en las filas del ejército, sin éxito. Expulsado del comité por una moción de censura y conducta impropia, acabaría refugiado en el alcohol y rechazado por otros senadores. Quedaría solo, inestable mentalmente y morirá víctima de la cirrosis hepática a los 48 años.

Otro punto interesante, que el film de Clint no toca es que el FBI investigó durante la Guerra Fría a políticos, cantantes y deportistas foráneos, como Pablo Picasso, John Lennon, Marilyn Monroe (está si sale por la relación amorosa con JFK), Elvis Presley o Lucille Ball.
Esta etapa, se caracteriza por la cuestionable decisión del mandato a sus empleados de quemar las cintas y evidencias del seguimiento y posterior asesinato de John Fitzgerald Kennedy.
Ahora que se cumplen los 50 años de aquel magnicidio con numerosas incógnitas y movimientos extraños, JFK vuelve a estar en la primera página de los noticiarios. Demostración de la dramática y universal noticia.
La línea seguida por el mandatario del FBI, incluye las declaraciones de una testigo y empleada de limpieza en la central de la oficina de investigación americana, que diría marcharse llorando tras la muerte de su hermano Bobby Kennedy, ante la frialdad y maldad de J.E. Hoover...
Existe una documental reportaje sobre algunos de los protagonistas de aquella fecha. Más concretamente de un puñado de hombres, que en Texas cubriría la protección de uno de los hombres más poderosos del mundo, los oficiales de a pie del FBI. Y de las consecuencias psicológicas que permanecen aún 50 años después del fracaso.
Más oscurantismo relacionado con uno de los hombres más poderoso de USA.

Tras la muerte de J. Edgar, el presidente Nixon aprobaría la ley de máximo mandato de 10 años para los directores del FBI (Hoover estaría casi 50). Y en 2001 un senador impulsaría una propuesta para borrar su nombre del edificio del FBI, que sería denegada.

La otra polémica. Como a J. Edgar Hoover no se le conoció relación emocional con ninguna mujer, se le ha tildado de homosexualidad sin pruebas definitorias. Arriesgada apuesta de Eastwood al unirle sentimentalmente con el director asociado y nombrado por él mismo, Clyde Tolson (interpretado valientemente por Armie Hammer). Clint rueda escenas que han levantado ampollas en ciertos círculos de la sociedad estadounidense.
Nunca un vestido habrá sido tan polémico en el cine, ni siquiera los entallados y sexualmente provocadores de las estrellas pelirrojas de Hollywood.

Una película que se basa en la imagen de un personaje universal, con buenas interpretaciones y excelente fotografía, y sobre todo, con un Leo DiCaprio demostrando el porqué es uno de los mejores actores de la actualidad.

En definitiva, una notable obra del incombustible pistolero del poncho rancio y el puro en la boca.
Larga vida Sr. Clint Eastwood. Es un placer visionar sus films.

*** Notable ***

Nuevo trabajo de Leonardo DiCaprio con la dirección de Martin Scorsese, The Wolf of Wall Street. Reparto: Leonardo DiCaprio, Jonah Hill, Matthew McConaughey, Jean Dujardin, Kyle Chandler, Rob Reiner, Jon Bernthal, Jon Favreau, Ethan Suplee, Margot Robbie, Cristin Milioti.


El próximo trabajo de Clint Eastwood no traerá a Beyoncé con una versión de Ha Nacido una Estrella. Leo por su parte, trabaja en los dos films con Martin Scorsese, incluído un esperado Sinatra.

Y una noticia con vueltas, Michael Keaton volverá a ponerse el traje de superhéroe en la nueva película de Alejandro González Iñárritu, titulada Birdman. Reparto: Michael Keaton, Emma Stone, Edward Norton, Zach Galifianakis, Naomi Watts, Andrea Riseborough. Foto-reportaje en inglés.

Cinemomio: Thank you

Las más alteradas del Cinecomio

Etiquetas

Serie TV-Scifi Serie Tv - Terror Jessica Chastain Matthew McConaughey Clint Eastwood Emma Stone Jake Gyllenhaal Serie Tv - Thriller Carey Mulligan Humor Amy Adams Chris Pine David Fincher Denis Villeneuve Ewan McGregor Hugh Jackman Mads Mikkelsen Michael Fassbender Ridley Scott Tom Cruise Tom Hanks Woody Allen Anna Kendrick Anthony Hopkins Ben Affleck Cine Documental Daniel Radcliffe Eva Green Joaquin Phoenix Keira Knightley Kristen Stewart Leonardo DiCaprio Martin Scorsese Melissa Leo Michael Caine Michelle Williams Mike Flanagan Oscar Isaac Paul Dano Peter Sarsgaard Ryan Gosling Tim Burton Tom Hardy Alan Arkin Alec Baldwin Alejandro González Iñarritu Alex de la Iglesia Andrew Garfield Anton Yelchin Antonio Banderas Anya Taylor-Joy Audrey Tautou Benedict Cumberbatch Brad Pitt Bruce Willis Bárbara Lennie Cary Fukunaga Cate Blanchett Chiwetel Ejiofor Chris Penn Chris Pratt Christopher Nolan Christopher Walken Damien Chazelle David Ayer David Cronenberg David Mackenzie David Thewlis Denzel Washington Eddie Redmayne Edward Norton Ethan Hawke Felicity Jones Frances McDormand Francis Ford Coppola Gael García Bernal Gary Oldman George Clooney Guy Pearce Harvel Keitel Helena Bonham Carter Hugh Dancy Hugo Weaving Isabelle Huppert J. K. Simmons J.J. Abrams James Gunn James McAvoy Jean Marc Vallée Jean-Pierre Jeunet Jeff Nichols Jesse Eisenberg John Cusack John Goodman John Hurt John Turturro Jonah Hill Josh Brolin Julianne Moore Juliette Binoche Kate Bosworth Kenneth Branagh Kirsten Dunst Kurt Russell M. Night Shyamalan Marion Cotillard Mark Ruffalo Martin Freeman Matthew Modine Meryl Streep Mia Wasikowska Michael Pitt Michael Shannon Miles Teller Mélanie Thierry Nacho Vigalondo Nicolas Cage Nicolas Widing Refn Olivier Assayas Paolo Sorrentino Paul Giamatti Peter Jackson Quentin Tarantino Ralph Fiennes Ricardo Darín Richard Gere Richard Jenkins Robert Zemeckis Rosamund Pike Sam Shepard Samuel L. Jackson Saoirse Ronan Scarlett Johansson Sean Penn Series Tv - Terror Seth Rogen Sienna Miller Stellan Skarsgard Steve McQueen Tilda Swinton Tim Roth Viggo Mortensen Wes Anderson William Hurt Winona Ryder Woody Harrelson Zoe Saldana 2001: A Space Odyssey A Dangerous Method A Passage to India Abel Ferrara Al Pacino Albert Finney Alexander Payne Alexandre Aja Alfonso Cuarón Alice Eve Amanda Seyfried Amour An Education Angelina Jolie Animación Animación Digital Animación Japonesa Annette Bening Armie Hammer Ava Duvernay Barbara Stanwyck Ben Foster Ben Wheatley Bennett Miller Bertrand Bonello Bertrand Tavernier Bes Foster Bill Murray Billy Bob Thornton Bradley Cooper Brie Larson Brit Marling Bryce Dallas Howard Callum Keith Rennie Carlos Vermut Carmen Ejogo Carnage Casey Affleck Channing Tatum Charlotte Gainsbourg Christina Hendricks Christoph Waltz Colin Firth Collin Farrell Damián Scifrón Dan Gilroy Daniel Monzón Darren Aronofsky David Ayelowo David Dobkin David Yates Demi Moore Denis Levant Drake Doremus Duncan Jones Ed Harris Edward Burns Elijah Wood Elizabeth McGovern Ellar Coltrane Ellen Barkin Emile Hirsch Emily Blunt Emma Thompson Emmanuelle Seigner Essie Davis Fede Alvárez Frank Capra François Cluzet Gary Ross Gavin O´Connor Gene Hackman Geoffrey Rush Giuseppe Tornatore Gracia Querejeta Greg Mottola Guillaume Sylvestre Gérard Depardieu Harvey Keitel Henry Fonda Hnos. Coen Hnos. Dardenne Hossein Amini Hugo Isabella Rosselini J. Edgar J.C. Chandor Jack Black Jacob Trambley Jacqueline Bisset Jacques Audiard James Cameron James Gray James Marsh January Jones Jared Leto Jeff Bridges Jennifer Garner Jeremy Irons Jeremy Salunier Jim Broadbent Jim Sturgess John Carney John Ford John Lee Hancock John Malkovich John Travolta Johnny Deep Jonathan Nolan Jose Sacristán Joseph Gordon-Lewitt Julia Roberts Karyn Kusama Kevin Costner Kevin Smith Kiefer Sutherland Kim Nguyen Kristen Wiig Kyle Catlett La Clase La Ola La vida de Brian Lambert Wilson Lars von Trier Laurence Fishburne Leos Carax LiLy Collins Lindsay Duncan Logan Marshall-Green Luc Besson Luis Tosar Luke Wilson Macha Grenon Marc Forster Marc Webb Mark Wahlberg Martin Sheen Mateo Gil Mathieu Amalric Matthew Broderick Meet John Doe Mel Gibson Melissa McCarthy Michael Almereyda Michael Brandt Michael Haneke Michael Keaton Michael Madsen Michael Peña Miguel Gomes Mike Cahill Mike Figgis Mike Leigh Mira Sorvino Monty Phyton Morgan Freeman Morten Tyldum Mélanie Laurent Nadine Labaki Naomi Watts Naomie Harris Nathan Lane Ned Benson Neil LaBoute Nicholas Hoult Nicholas Jerecki Nick Nolte Nourizadeh Nima Olivia Colman Olivia Wilde Olivier Marchal Omar Sy Orson Welles Paddy Considine Park Chan-wook Patricia Arquette Paul Greengrass Paul Haggis Paul Thomas Anderson Paul Verhoeven Peter Berg Peter Dinklage Peter Mulan Philip Seymour Hoffman Philippe Falardeau Preston Sturges Quvenzhané Wallis Rachel Weisz Reese Whiterspoon Ric O´Barry Richard Ayoade Richard Glatzer Richard Harris Richard Linklater Rob Marshall Robert Downey Jr. Robert Duvall Robert Eggers Robert Pattinson Robert Redford Roger Donaldson Roger Michell Roman Polanski Rose Byrne Ruben Fleischer Sam Levinson Sam Whorthington Sandra Bullock Sarah Gadon Sarah Polley Simon Curtis Simon Pegg Soledad Villamil Soul Kitchen Stanley Kubrick Staying Alive Stephen Lang Steve Buscemi Steve Carell Steven Knight Steven Soderbergh Tarsem Singh Tate Taylor Terrence Malick Terry Gilliam Thandie Newton Thomas Dekker Thomas Jane Thomas Winterberg Timothy Spall Todd Phillips Tom Dicillo Tom Ford Tom Hiddleston Tom Tykwer Tom Wilkinson Topher Grace Trailer The Wolf of Wall Street Uma Thurman Valérie Donzelli Vince Vaughn Viola Davis Yoji Yamada Yorgos Lanthimos Zachary Quinto Zoe Kazan
Licencia de Creative Commons
Obra está bajo una licencia CC en España.