Tres producciones europeas en las escuelas.
En marzo de 2008, las elecciones generales españolas vieron ganador al partido socialista y presidente a José Luis Rodríguez Zapatero. Ahora en 2013, hay otro presidente que tampoco está por la labor de mejorar las materias educativas del país. No sé muy bien hacia adónde se dirige el futuro de nuestros jóvenes, cada día más perdidos.
Dada la inclinación de los mismos a las políticas de carácter progresista, comenzaron la carrera hacia la legalización de todo tipo de inmigración irregular. Era de imaginar que tarde o temprano, esto traería repercusiones en el sistema educativo español.
Además, de sus devaneos para otorgar a las distintas comunidades autónomas de una mayor permisividad en los métodos para gestionar sus gastos, se produjo un retroceso en la calidad y los medios, de zonas más olvidadas de las regiones españolas.
Así, era de esperar, que otros países europeos también reflejaran los problemas intrínsecos a un proceso de degradación progresiva. El cine lo reflejó también en 2008, con tres cintas de calidad.
En estos momentos de recesión económica galopante y un paro laboral entre los jóvenes inasumible, es gracioso, ver convertidas las calles españolas con los profesores en huelga por una cosa nimia de dos horas a la semana. Cuando las clases en colegios e institutos se han convertido en verdaderos cuadriláteros de confrontación entre chavales, padres y maestros.
Sí, es verdaderamente hilarante que a una huelga convocada por el aparato sindical en la educación, se le sumen los jóvenes. Quizás teledirigidos y con inclinación natural a la ideología de izquierdas (como yo mismo hace ya algunos años). Este país es de pandereta. Aquí, los medios y las películas cierran los ojos a los problemas actuales. Sólo dan puntadas hacia la comedia facilona y exasperante, o las penalidades de la guerra civil española. La política y la comercialidad de lo facilón.
En 2008, Francia refleja sus problemas en los métodos educativos debido a la mezcla de muy distintas conciencias. El cuarto film de Laurent Cantet, La Clase, refleja en un instituto de un barrio marginal, la confrontación de profesores con alumnos que no desean incorporarse a sus métodos educativos. Dónde el diálogo entre distintas culturas y niveles formativos, es prácticamente imposible. Y por tanto, se produce un laberinto del que no se puede salir, sin el uso de la violencia.
*** Buena ***
Aquí en España, cuando se produce este aperturismo regularizador y se producen casos violentos todas las semanas en los colegios (salen por los distintos medios de comunicación). Pero, el cine está mudo.
Esto provocará un deterioro de los servicios imprescindibles para un progreso de la juventud (así como de la sanidad, la justicia y otros medios de protección del ciudadano).
Tampoco los profesores supieron o no quisieron sumarse a la protesta ciudadana, por la agresividad de los hechos. Es probable que muchos siguieran votando a los partidos y siguiendo a las mismas agrupaciones sindicales.
La película alemana La Ola, también estrenada en 2008, muestra más acritud y la violencia supera los límites, cuando se involucra la política y se intenta adoctrinar con la ideología extremista (de cualquier tipo) en los cerebros de jóvenes más moldeables. La dirección de Dennis Gansel, refleja el paralelismo con un caso real acontecido en un instituto de California en 1967.
Pero, si esto ocurre en Alemania y se experimenta con la vuelta a la exclusión por diferencias culturales, raciales o sociales.
Explotaría la bomba en nuestras caras de nuevo.
**** Notable ****
En España, ciertas comunidades autónomas con diferentes grados de autogobierno conducen a los niños a exclusiones y un adoctrinamiento ilógico.
Por lo que, el futuro es un pozo sin fondo de demagogias y separatismo. La educación se produce por osmosis y la facilidad de impregnación infantil, hará lo más normal. La misión está en marcha, el odio.
El cine y la televisión callan. Se ocupan de la sexualidad y las drogas en la juventud, vaya novedad.
Con un gasto del aparataje de mantenimiento de estas ideologías, el Estado se resquebraja, y el gasto se dispara a la desmesura. La crisis se hará gigante.
Se mantiene una elevadísima casta de protegidos en entidades públicas y liberados sindicales. Mientras, muchos de los estudiantes universitarios terminan sus carreras, y se apuntan al paro. Y ven como un rayo de luz en el horizonte, entrar en el mecanismo y la protección del Estado. Masificación...
Así, tenemos en el ruedo social con un paro del 20% y las arcas municipales y estatales a punto del descabello, a los profesores con las 2 "h-orejas" en la mano. Cuando a la mayoría de trabajadores privados, nos amenazan con el despido. A otros congelados, las subidas del IPC, y sin rechistar. Algunos con horillas gratis de rondón, etc...
Con este desesperante panorama, el film "La Ola" se vuelca en la denuncia. Si bien se trata de una ficción o un experimento, arremete con las ideologías, caso contrario a la cinematografía española con una situación irreversible y poco realista de la actualidad. Y el gasto insufrible.
Los niños saldrán con una ideología radicalizada y basada en el odio al foráneo. Mal pinta.
La última producción del año 2008, es una película inglesa titulada An Education, de la danesa Lone Scherfig (Wilbur se quiere suicidar). 3 nominaciones a los Oscars, premios de la crítica y fotografía en Sundance, y mejor actriz dramática, para la interesante y mágica, Carey Mulligan, portentosas interpretaciones como en la exitosa Drive (un reparto de lujo con Peter Sarsgaard, Alfred Molina, Emma Thompson, Dominic Cooper y Rosamund Pike).
Muestra la atracción de una joven y prometedora estudiante, con pretensiones de entrar en Oxford, por una vida más complaciente, pero peligrosa. Las dudas del camino a elegir y los riesgos de una prosperidad, fuera de los controles y la ley.
Desde luego, un posible camino, para los millones de parados de este país.
Los políticos deberían dar ejemplo, y mantener la claridad en todas sus acciones, con los dineros públicos. Amén.
**** Notable ****
Postdata: también existen películas con otras perspectivas mucho más duras, pero con una visión de futuro no tan apocalíptica. Si quieres pasarlo mal, y echar una mirada a la cruda realidad en las familias desfragmentadas. Un ejemplo es el notable film americano Precious. Pero aviso, dura vida para los marginales...
**** Notable ****
Tráiler Blue Valantine A Love History, de Derek Cianfrance. Reparto: Ryan Gosling, Michelle Williams, Mike Vogel, John Doman.